De hecho, la columna la bautizamos como golpeada pero no abatida. Luego de esa columna he tenido muchos días de reflexión, el reflexionar es un ejercicio bien importante para poder tener una mejor visión de donde estamos. La reflexión debe ser un ejercicio continuo pero pausado, ya que como les he dicho antes vivimos en un mundo muy acelerado. Esta reflexión me llevo a decirme “verdaderamente es época de celebrar” y si estamos en una de las épocas que más me gusta en el año, la época Navideña, sin embargo, hablo de celebrarme a mi misma.

El levantarme a diario a las 7:00 a.m. y acostarme luego de la 1:00 a.m. para cumplir con mi trabajo, mis tareas, mi negocio el cual esta comenzando y mi relación es algo que no todo el mundo hace. Y si, hay días que me levanto en el que me pregunto valdrá la pena tanto sacrificio y luego miro como poco a poco las cosas van cayendo en su lugar que me doy cuenta de que definitivamente si vale la pena continuar.

Así es que esta columna mas socioemocional no puede ser. Todo lo que hagamos va a tener algún tipo de tropiezo, sea grande o sea pequeño. Esto ocurrirá especialmente cuando lo que estas realizando lo haces por primera vez. No vinimos a este mundo estando aprendidos y es importante entender que debemos de ver estos escollos o dificultades como un escalón de aprendizaje. Abran escalones que te aparten un poco de tu meta, es cierto, más llegaran escalones que te harán mejorar lo que estabas pensando realizar.

Celébrate, celebra como eres, como caminas, como te ríes, celebra que lloraste y te secaste las lágrimas, celebra las caídas porque hubo y habrá un momento para levantarte, celebra las despedidas porque llegará una persona nueva a tu vida, celebra que hubo amargura porque pronto llegara dulzura. Celebra, ámate, se tú.

Un abrazo en la distancia, tu amiga de siempre,

Sharon

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