Abril 19, 2024

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Distopia: Los universos paralelos de la literatura - Por Francisco Pérez

Existen muchos géneros en la literatura actual, tales como el romance, la novela histórica, la novela negra, etc., pero un género no muy conocido, es el de la novela distópica, que cada cierto tiempo llega a la palestra por que es adaptada a la pantalla grande.  Este es el caso, por ejemplo, de “los juegos del hambre”, “Divergente”, “Máquinas mortales”, “Mentes Poderosas”, “Ready Player One” y así suman y siguen.

Pero en que consiste la literatura distópica.  Se tratan de relatos sobre mundos que han sido azotados por guerras, pandemias, desastres ambientales o bajo gobiernos tiránicos y nos presentan una realidad donde la sociedad se encuentra en un declive tanto en sus valores como en el modo en que llevan la existencia sus personajes.

A pesar de que este género, hoy en día está más dirigido al público juvenil, sus orígenes datan del siglo pasado, cuando los escritores de ciencia ficción, como Julio Verne, Ray Bradbury y George Orwell comenzaron a escribir sobre sociedades futuristas donde el progreso y la tecnología llevaban a la sociedad a un derrumbe valórico, a la pobreza y a la explotación de los más poderosos sobre los más débiles.

Entre las obras más famosas, tenemos el caso de “1984”, obra de George Orwell, publicada el año 1949, donde nos describe un país llamado Oceanía que se encuentra dominado por un gobierno totalitario que mantiene en constante vigilancia a sus ciudadanos, y que incluso encuentra la forma de espiar sus pensamientos, para mantener un estado en orden.  Esta novela es una de las más icónicas del siglo veinte, por su denuncia de prácticas establecidas por los gobiernos de Franco y Stalin, las cuales han sido adoptadas por muchos dictadores a lo largo de la historia.

Otra novela distópica, muy aclamada y también llevada a la pantalla grande es “Fahrenheit 451”, del escritor Ray Bradbury, publicada en 1953.  En esta novela, se nos presenta una sociedad estadounidense del futuro, en la que los libros se encuentran prohibidos, y existen los llamados “bomberos”, que se encargan de quemar cualquier libro que encuentren.  El protagonista, un bombero llamado Montag, cansado de su oficio como censurador del conocimiento, decide renunciar a su trabajo y eventualmente se hará parte de la resistencia, que se dedica a memorizar y compartir las mejores obras literarias del mundo.  El subtitulo de la obra, es una de las cosas que en lo personal más me gusta, ya que dice: “Fahrenheit 451: la temperatura a la que el papel de los libros se inflama y arde”.  Además de este libro, Bradbury también es conocido mundialmente por su obra “Crónicas Marcianas”.

Y si de los pioneros de la literatura distópica se trata, no puedo dejar de mencionar a Aldais Huxley y su obra “Un mundo feliz”, publicada el año 1932.  En esta novela encontramos a una sociedad donde los humanos son “cosechados” por medio de la técnica de reproducción artificial, así se crea una sociedad donde los nacimientos están normados de acuerdo con lo que el estado necesita en ese momento, ya sea obreros, maestros, médicos, etc., se crean humanos con las habilidades necesarias para el lugar que deben ocupar en la sociedad, además se les complementa sus conocimientos por medio de la hipnopedia, la enseñanza durante el sueño, que les inculca consignas y educación.

La novela distópica de nuestros tiempos, trata algunos temas que se trataban en sus inicios, aunque no de forma tan extrema como con clásicos que ya he mencionado, debido al tipo de público que hoy en día va dirigido este género, mayormente el lector juvenil, aún así, siguen siendo historias igual de reflexivas en las que se combinan la aventura, intriga, la ciencia ficción y el romance, sin obviar que el lector se detenga a pensar sobre lo acertado o no de ciertos comportamientos de las consecuencias que pueda acarrear para la sociedad.  Como antes mencioné, muchas de las distopías actuales han sido llevadas al cine, sin lograr, bajo mi percepción, alcanzar el nivel del libro en el que están basados.

“The Maze Runner”, o el “Corredor del Laberinto”, del escritor James Dashner, publicada en el año 2009, es una saga de tres libros que se hizo muy conocida al ser llevada a la pantalla grande.  En esta obra Dashner nos describe un mundo apocalíptico, resultado de una erupción solar, donde el mundo se vio afectado por un colapso social, desapareciendo gran parte de la humanidad, esto sumado simultáneamente al escape de un arma biológica infectando a gran parte de la población restante.  Con el paso del tiempo nuevas generaciones comienzan a nacer con inmunidad a esta enfermedad que le llaman “la llamarada”, donde las victimas enloquecen y comienzan a asesinar a quienes lo rodean.  Los pocos gobiernos que quedan en pie se mancomunan para reunir a todos los jóvenes inmunes a la llamarada y ponerlos frente a diferentes pruebas para lograr descubrir el origen de su inmunidad, y con ello poder conseguir una cura.

Pero si no conoces “The Maze Runner”, sin duda al menos has oído hablas de “Los Juegos del Hambre”, una de las obras icónicas de este género.  Escrita por Suzanne Collins y publica en el año 2008, esta saga de tres libros más una precuela, se desarrolla en un futuro no definido, después de la destrucción de la actual América del Norte, en un país llamado Panem, lugar formado el Capitolio centro neural y rico del país, y doce, antes trece, distritos que lo rodean.  Los distritos son productores de materias primas y se encargan de abastecer al Capitolio.  Los habitantes de los distritos son obreros y gente pobre, que, como castigo por revelarse en contra del Capitolio, cada año un chico y una chica de entre doce y dieciocho años son seleccionados por sorteo y obligados a participar en los juegos del hambre, un evento televisado donde los participantes deben de luchar a muerte en la Arena, hasta que exista solo un vencedor.  El ganador y su distrito recibirán grandes riquezas y alimentos por esta proeza.

Y, por último, pero no menos conocida, tenemos la saga “Divergente”, de la escritora Veronica Rooth publicada el año 2011.  Esta obra nos trae una futurística ciudad de Chicago, que después de alcanzar “la gran paz”, se ha decidido agrupar a las personas en cinco facciones, con el fin de erradicar los males que los llevaron a la gran guerra.  Quienes culpaban a la agresividad crean la facción de “Cordialidad”, los que culpaban a la ignorancia se agrupan en “Erudición”, contra el engaño surge “Verdad”, contra el egoísmo esta “Abnegación” y contra la cobardía se creara “Osadía”.  Así, al cumplir los dieciséis años, cada individuo debe tomar la decisión de permanecer en la facción de sus padres o cambiarse y formar una nueva familia en la facción que a elegido.  Tras la ceremonia de iniciación, todos los jóvenes deben pasar por un proceso de iniciación de acuerdo con la facción que pertenecen, el que no lo supere será conocido como un “sin facción”, y será abandonado a su suerte, viviendo en los límites de Chicago.

Estos son sólo unos pequeños ejemplos de las novelas distópicas de nuestros tiempos, que, en lo personal, es uno de mis géneros favoritos, por lo general se tratan de sagas de tres o cuatro y libros y muchos de hechos tienen precuelas y libros anexos dedicados a las aventuras e inicios de los personajes de cada historia.  Si te llamo la atención, te aconsejo que te animes a leer alguna de estas historias, y no te dejes llevar solo con la adaptación que el cine hizo de algunas de estas obras, porque, en la mayoría de los casos, el libro es muchas veces superior.

 

 

 

 

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Modificado por última vez en Miércoles, 21 Abril 2021 20:18
Francisco Pérez

Fanático de la lectura

Autor senior en Histrionico.com

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